En un mercado tan sumamente competitivo como el de la abogacía, Internet puede convertirse en todo un nicho para captar potenciales clientes, siempre y cuando los bufetes sepan cómo aprovechar todos los recursos a su alcance.

Si el marketing de contenidos ya de por sí es resorte para fortalecer la reputación de una firma en cualquier ámbito empresarial, también es una gran oportunidad para acercar a los ciudadanos a una temática en ocasiones engorrosa por la terminología legal, como es el mundo de la abogacía.

En muchas ocasiones los bufetes exhiben un plan de comunicación equivocado, pues más que acercarse a la ciudadanía pareciese que están en plena competición con otros despachos para ver cuál de ellos hila más fino. Publicaciones que, más que enfocadas al público general, son coto casi privado para los profesionales del sector. He aquí el craso error.

La clave de una buena estrategia de marketing de contenidos para abogados está en la elaboración de textos jurídicos realmente útiles que ilustren sobre la esencia a través de un lenguaje cercano, aunque sin perder la perspectiva formal. De esta forma, el consumidor medio podrá asumir los conceptos, al mismo tiempo que se fomenta la cercanía con un bufete que sí satisface sus inquietudes.

Las últimas novedades en cuanto a normativa legal, las sentencias que puedan sentar jurisprudencia o los propios logros cosechados por el despacho de abogados en cuestión son un buen arranque para realizar la primera incursión en el ámbito digitalizado.

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