Los formatos audiovisuales han evolucionado mucho desde que los hermanos Lumière hicieron la primera proyección pública hace más de 100 años. Internet y las redes sociales han coronado al vídeo como rey y, para reinar con él, hay que conocerlo y adaptarse a su realidad cambiante.

Para empezar, hay que familiarizarse perfectamente con cada formato y soporte. No es igual grabar un largometraje que subir los Instagram Stories… Ser adecuado, para que el vídeo refleje el mensaje que se quiere mandar y alcance al público objetivo, es clave en comunicación. Como ocurre con la voz, si el “tono” no es el adecuado no tendremos el retorno esperado e incluso puede que nos perjudique.

Por ejemplo, se puede realizar un contenido promocional de un establecimiento, como este de Pastelería La Guinda, sin diálogos, planos cortos y con cierto toque de humor. Muy distinto es el estilo de este tutorial de Padel de Locos donde prima la didáctica y la repetición, sin música de fondo, en un plano secuencia.

Gracias a nuestra contrastada experiencia en marketing conocemos bien los soportes y las temáticas. Si tienes algo que contar, nosotros lo contamos.

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