Cuando vamos al cine lo que queremos es obviamente ver la película, todas las interrupciones son inoportunas y a todos nos molesta tener que escuchar como nuestro vecino sorbe su refresco o come haciendo ruido.

Basándose en este insight, Coca-Cola ha llevado a cabo una divertida acción en un cine de Copenhague, insertando a los espectadores dentro del rodaje.

En creærte nos ha encantado esta campaña titulada “Slurps!”.

Comparte esta noticia: