En publicidad, la creatividad es algo necesario y de la que tenemos que hacer uso cada día. Si existe otro sector que debe vivir bajo la norma de innovar o morir es sin duda el de la moda. Y que mejor ejemplo de esto que Karl Lagerfeld, quien ha sido uno de los grandes iconos de la alta costura.

De origen alemán, Lagerfeld comenzó su carrera a los 21 años, ganando el prestigioso concurso International Wool Secretariat, donde también triunfó Yves Saint Laurent. Gracias a ello, comenzó a trabajar para Pierre Balmain en la década de los 50´s. Poco después realizó diseños para la Casa Patou, Chloé y Fendi. Pero donde alcanzaría la fama fue sin duda en la casa Chanel en 1983, para quien trabajó el resto de su vida, volviéndola a llevar a lo más alto.

Creativo extraordinario, estuvo detrás de muchos de los logros de la firma, reinventando los códigos de la marca como la chaqueta Chanel o los bolsos acolchados.

Conocido por adaptarse a los nuevos tiempos, organizó desfiles con puestas en escena sorprendentes, reconstruyendo tanto un supermercado, como una galería de arte o una calle, que tuvieron un gran éxito. También se le reconoce por realizar las campañas de la marca, gracias a su imaginación exploró muchos horizontes artísticos, incluidos la fotografía y los cortometrajes. Su impulso de los talleres artesanos y la capacidad para adelantarse a su tiempo, contribuyeron al éxito de ‘maison’ francesa en todo el mundo.

 

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